La última parada ferroviaria corresponde a la Estación Ramos Otero del ramal Ayacucho-Quequén-Necochea del FCS. La misma se habilitó en febrero de 1892 al igual que la línea y fue construída en tierras donadas por Don Ignacio Ramos Otero, dueño del campo que cobijaría vías y parada.
El pueblo se ubica a 54 kilómetros de Balcarce y a 18 de la Provincial 29. Su población actual se eleva a los 95 habitantes.
El edificio se encuentra en total estado de abandono, y si bien no pudo tildarlo de irrecuperable, porque su caja está entera, el costo del reciclado sería enorme, hecho que hoy inevitablemente lo condena a una muerte lenta y segura.
Por sus vías pasan ocasionales formaciones del Ferrosur Roca con destino al puerto de Quequén.
Final de travesía, como seguirá la historia, no sé, será cuestión de armar la mochila, cargar máquina, anotador y salir en búsqueda de nuevo material arqueológico, todavía quedan muchos yacimientos por explorar.
El pueblo se ubica a 54 kilómetros de Balcarce y a 18 de la Provincial 29. Su población actual se eleva a los 95 habitantes.
El edificio se encuentra en total estado de abandono, y si bien no pudo tildarlo de irrecuperable, porque su caja está entera, el costo del reciclado sería enorme, hecho que hoy inevitablemente lo condena a una muerte lenta y segura.
Por sus vías pasan ocasionales formaciones del Ferrosur Roca con destino al puerto de Quequén.
Final de travesía, como seguirá la historia, no sé, será cuestión de armar la mochila, cargar máquina, anotador y salir en búsqueda de nuevo material arqueológico, todavía quedan muchos yacimientos por explorar.