En lugar de vagones, vacas, en lugar de vías y durmientes, pastura para el ganado, en lugar de pasajeros a la espera del tren, implementos agrícolas, en lugar del bullicio característico, el mayor de los silencios, sólo quedan recuerdos cada vez más vagos y lejanos entre quienes vivieron la época de esplendor del ferrocarril.
Mi padre fue jefe de estacion durante muchos años cuando nos fuimos hace mas de 50 años la estacion se cerro
ResponderEliminarEn esa estacion nacimos todos los hermanos somo 7. Estudiamos en un colegio rural que con el tiempo cerro y terminamos estudiando en el hogar alzaga unzue
ResponderEliminar